La silueta de la torre crea placas de piso más anchas hacia la parte superior, que ofrecen vistas panorámicas de los alrededores. Sesenta y tres pisos se interrumpen por vestíbulos elevados, que brindan espacios de reunión e instalaciones de encuentro para el personal. Al ingresar al edificio, un vestíbulo de 18 metros de altura en la base de la torre invita a los empleados y visitantes a entrar. El piso 18 cuenta con un restaurante de doble altura mientras que el piso 19 posee un gimnasio de última generación. Sobre el piso 38, se sitúa un exclusivo salón de baile y un auditorio, que se acompañan con vistas panorámicas de la bahía y la ciudad. Estas áreas comunes se complementan con el club del presidente ubicado en el volumen elevado del vértice de la torre, iluminado por una claraboya que traza un arco a través del espacio.